Los mayores errores de salud bucal que se deben evitar

Queridos amigos,

A menudo me confiesan que cuidar su salud bucal les genera ansiedad. Lo entiendo. Al fin y al cabo, a nadie le gusta que le empasten una caries o, peor aún, que le hagan una endodoncia.

Puede parecer inevitable tener problemas dentales o encías. Por suerte, no lo es. Créeme, un hombre con 30 años de experiencia en el cuidado bucal: al evitar estos errores comunes, puedes proteger tu salud bucal durante años.

Error n.° 1: usar enjuague bucal antiséptico

Los enjuagues bucales antisépticos y otros productos contienen alcohol, que elimina el 99 % de las bacterias de la boca. Aunque no lo creas, esto es un problema.

Más de 6 mil millones —sí, mil millones— de bacterias viven en tu boca, pertenecientes a 700 especies diferentes. Este ecosistema se denomina microbioma oral, y la gran mayoría de las bacterias que lo componen son beneficiosas. De las 700 especies de bacterias orales, solo entre 15 y 20 son perjudiciales. Estas bacterias perjudiciales, causadas por una mala higiene bucal y una mala alimentación, forman una biopelícula si no se tratan, lo que a su vez causa placa y caries. Si no se tratan, las caries no solo pueden causar infecciones dolorosas y peligrosas en la boca, sino que también pueden propagarlas al intestino e incluso al corazón.

Obviamente, limpiar y eliminar las bacterias bucales dañinas es fundamental. Pero una de las mejores herramientas para mantener un microbioma bucal equilibrado son las bacterias bucales beneficiosas. Además de combatir la placa, las bacterias bucales beneficiosas mantienen la boca hidratada y ayudan a descomponer los alimentos, lo que facilita el proceso digestivo. Algunos microbios incluso contribuyen a la formación de óxido nítrico, una sustancia química relacionada con el flujo sanguíneo que desempeña un papel clave en la regulación de la función endotelial, la presión arterial y la sensibilidad a la insulina.

Tu boca es un ecosistema delicado. Destruirla con un enjuague bucal antiséptico agresivo hace mucho más daño que bien.

Error n.° 2: No usar hilo dental ni raspar la lengua

La gente suele bromear (¡o no!) sobre mentirles a sus dentistas sobre el uso del hilo dental. ¿No sería más fácil no tener que mentir en absoluto?

Como siempre digo: "Usa hilo dental solo en los dientes que quieres conservar". Yo uso hilo dental en carrete, palillos interdentales de goma o palillos de hilo dental.

En lugar de usar un enjuague bucal antiséptico, usa hilo dental y raspa la lengua para eliminar la acumulación de comida y las bacterias dañinas. Un beneficio adicional de rasparse la lengua es que ayuda a tus papilas gustativas, lo que hará que la comida sepa mucho mejor. Una vez que te acostumbres a estas prácticas, te prometo que te sorprenderás de lo bien que te sentirás.

También recomiendo el oil pulling como ritual previo al cepillado. Lo hago durante mi ducha matutina al menos 3 veces por semana.

En cuanto al cuidado bucal a lo largo del día, evite los refrescos y el agua con gas. Reduzca los carbohidratos en su dieta y aumente el consumo de verduras y hortalizas. Esto beneficia su salud bucal y general. Enjuáguese los dientes con agua unos minutos después de comer para evitar la acidificación del esmalte.

Y no hace falta decirlo, pero espero que nunca te olvides de cepillarte los dientes, por muy cansado que estés. Si te preocupa consumir demasiado flúor, podrías considerar cepillarte los dientes con nanohidroxiapatita por la mañana o añadir un probiótico oral.

Error n.° 3: cepillarse los dientes con demasiada fuerza  

A la hora de cepillarse los dientes, muchas personas creen erróneamente que cepillarse con más fuerza es mejor. De hecho, es todo lo contrario. Cepillarse los dientes con demasiada fuerza provoca el desgaste del delicado tejido gingival, conocido como recesión gingival. Las encías no son como la piel o el cabello; una vez que se retraen, desaparecen para siempre, a menos que se opte por la cirugía.

Las encías retraídas dejan los dientes propensos a caries y otras infecciones, además del dolor cotidiano de la sensibilidad dental.

Su dentista es la persona indicada para decirle si sus encías están retraídas, pero si ya es propenso a las caries o al dolor dental, las mejores maneras de prevenir una mayor retracción gingival son dormir con un protector bucal si rechina los dientes y cepillarse los dientes con un cepillo de cerdas suaves. En casos extremos, también podría considerar aplicar bótox en la mandíbula cada 6 meses.

En cuanto al cepillado, la mejor manera de hacerlo es con suavidad, con movimientos circulares. Si no te molesta enjuagarte con agua después de cepillarte, mejor no lo hagas.

Y por último, pero no menos importante, continúe visitando a su dentista cada 6 meses para una limpieza regular. Asegúrese de sentirse cómodo con su dentista y su estilo de limpieza, y busque una segunda opinión de otro dentista profesional si tiene alguna duda.

Aunque todo lo anterior son reflexiones basadas en mi experiencia personal, su dentista siempre debe tener la última palabra sobre su salud bucal. Pregúntele antes de realizar cualquier cambio en su rutina de cuidado bucal.

El cuidado bucal puede parecer intimidante, pero si evitas estos tres errores, estarás en el camino correcto hacia una sonrisa blanca, saludable y feliz.

Namasté,

Puneet